jueves, 17 de febrero de 2011

MANTA DE CORAZONES



Otro proyecto rápido. Casi un "weekend project" si no fuera porque hay que bordar unos cuantos corazones.


Pero bueno, no es para asustarse, los bordados son muy sencillos. Son todo puntada atrás, punto de tallo y algo (muy poco) de cadeneta. La tela que utilicé es una especie de lugana muy rústica y algo tosca, por eso las puntadas quedan un poco irregulares. Por eso y porque no utilicé bastidor, ejem...


No importa, porque el resultado final es fantástico, o al menos a mí me lo parece. Yo soy de la opinión de que las cosas hechas a mano no tienen porqué quedar perfectas. Fijaos, por ejempo, en el corazón pequeño de la derecha. El pobre está un poco deforme, pero a mi me gusta así, diferente.


Los cuadros son de 20x20. Para los dibujos de los corazones me inspiré en este libro, aunque la mayoría los fui haciendo sobre la marcha, algunos incluso a "aguja alzada" de lo simples que son. Así se entiende, claro, lo de las imperfecciones. Los bordé en distintos tonos de rojo, con dos cabos de mouliné.


Y como ando escasa de tiempo, sustituí el acolchado por el "knoting": uní las tres partes del sandwich (trasera, boata y top) anudando un hilo rojo en todas las intersecciones, algo que por lo visto hacen mucho los japoneses.



Y estos son el resto de corazones:






En una de las esquinas le puse un botón rojo sobre otro de nácar un poco más grande, anudado también con el mismo hilo rojo. Esto le da un toque gracioso.


Por último, lo cerré con una tela de cuadritos rojos y este es el resultado:


Un quilt romántico con aspecto nórdico que queda ideal en el sofá o doblado a los pies de la cama. Besinos.

MI SAN VALENTÍN



Aunque ya se ha acabado el mes, me apetecía enseñaros algunas cosas que hicimos en febrero. No suelo celebrar el día de San Valentin, pero el tema de los corazones me encanta. Es bastante recurrente en patchwork y se presta a muchas interpretaciones.

Estos corazones entrelazados son un regalo para alguien muy especial.


Después de acolcharlos y rematarlos con un bies, los puse en un marco de estos de Ikea que tienen mucha profundidad. Yo los uso mucho, me encantan. Puedes pegar en el fondo una lámina o una foto y meter dentro algún cachivache, algún recuerdo... y, además, son una opción barata para estos pequeños trabajos acolchados o para labores que tengan algún relieve.


Este corazón también va en uno de esos marcos. Cosí sobre lino blanco todos los botones rojos que encontré por casa. Algunos son usados, o de esos que vienen de repuesto junto con las etiquetas de la ropa. Le puse también un pequeño cascabel rojo en la punta y unos pocos brillos de Tilda.
De este trabajo tengo otra versión en casa que ya os enseñaré algún día. Es una corona hecha sobre lino de color beige con botones blancos y crudos que también quedó preciosa.


Y aquí el conjunto. No los colgué porque en la tienda todo son estanterías y escaparates, y tengo poca pared disponible.
El otro corazón rosa que véis se lo hice a Adelaida hace unos años y me lo prestó para la ocasión. Es un crazy que luego sobrepuse sobre un fondo sólido claro. Lo acolché y le metí un poco de relleno al corazón para que tuviera más relieve.


Y ¿qué me decís de las flores? Una pasada ¿verdad? Son del huerto, o más bien "prau" (como decimos por aquí) de mi madre. Son flores de membrillo japonés (chaenomeles japonica, que lo acabo de mirar en la wikipedia). Me encantan por el color y porque son de lo primero que florece por allí junto con las mimosas.Y, aunque sea un tópico, vienen anunciando que la estación termina y que la primavera puede con todo. Ves aparecer, en esos tallos que parecen secos, unos brotes verdes y unas flores de un rosa tan intenso que el contraste es una maravilla.



GUIRNALDAS
Son otro de mis temas favoritos. Esta es la que tuvimos colgada en el escaparate durante "esos días". Me gusta por lo sencilla que es. Los corazones están hechos de franela roja y tienen un pequeño bordado muy simple en blanco. Van ensartados en un hilo rústico blanco (tan rústico que es el que se usa para atar embutidos) y separados por unas bolas rojas de madera. Queda como muy nórdica ¿a que sí?




Esta otra guirnalda es más country. Los corazones alargados tienen un aire más primitivo y las telas "homespun" de cuadritos le dan ese toque rústico. La colgamos en el aula y allí sigue.


Os dejo algunas fotos más. Hasta que aprenda a hacer un mosaico de fotos o un slide de esos tan chulos, tendrán que ir en hilera. Prometo mejoras, pero...con tiempo.





ÁRBOL DE CORAZONES
Este árbol lleva ya tiempo conmigo. Me lo regaló mi amiga Carmen hace algunas navidades. Lo hizo su cuñado que es un manitas. La idea era ir cambiando la decoración según la época, pero sólo lo cambio en Navidad, luego le pongo los corazones y así se queda. A ver si este año me inspiro y en Pascua le cuelgo algo alusivo (no sé, porque como no me ponga ya...)


Os lo enseño ahora por lo de los corazones. Como véis, son todos pequeños, pero de formas variadas, en tonos rojos y rosas.





MÁS CORAZONES


Por último, estos son los corazones que hice cuando abrí la tienda como regalo de inauguración. Reservé unos pocos de recuerdo y los metí en uno de los ya famosos marcos de Ikea, y los tengo allí siempre conmigo. Un fetiche.
No recuerdo exactamnte cuántos, pero hice un montón. Traté de simplificar cosiéndolos a máquina con la costura hacia afuera sin más. Los rellené y les puse una cinta con el nombre a rotulador textil permanente. Fue todo un curro, pero mereció la pena.

Pues esto es todo, corazones. Espero no haberos aburrido con tanto romanticismo y tanto rojo pasión. Besos.